Hoy es la fiesta de San Mateo. El cambio
que él vivió en su vida nos hace ver hasta qué punto el Espíritu Santo
puede modificar nuestros planes y llevarnos a dónde no imaginamos.
Mateo era un cobrador de impuestos,
alguien tan enamorado del dinero que era capaz de aceptar cualquier
trabajo, aunque tuviera que explotar a su propio pueblo para
enriquecerse. Ciertamente, los pobres pescadores de Galilea habrán
sentido un fuerte rechazo hacia este explotador que estaba al servicio
del poder extranjero.
Por eso, en la conversión de Mateo se manifiesta lo que puede llegar a hacer el Espíritu Santo en un corazón humano, la maravillosa liberación que puede producirse cuando alguien se deja tocar y seducir por su fuego. Porque aquel esclavo de las seguridades económicas, al escuchar el "sígueme" de Jesús, abandonó la mesa de cobrador de impuestos y lo siguió (Mateo 9,9). Mateo era uno de esos pecadores que Jesús quería convertir, y por eso se acercaba a él y lo invitaba a seguirlo.
Sólo el Espíritu Santo nos hace capaces de escuchar ese llamado y de seguirlo hasta el fin.
" El cambio que él vivió (San Mateo) en su vida nos hace ver hasta qué punto el Espíritu Santo puede modificar nuestros planes y llevarnos a dónde no imaginamos. "
ResponderBorrarEsp. Santo acercate pronto a mis nietas que lo necesitan. Gracias sigo rezando por toda mi familia. buenos
ResponderBorrarEspíritu Santo, Gracias por tanto amor, te pido por mis hermanos que están a tu servicio. Ilumina su mente, abre el corazón de las personas que están en los retiros espirituales.
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