Ven Espíritu Santo

Ven Espíritu Santo

martes, 6 de agosto de 2019

06 de Agosto

"Ven Espíritu Santo, aplaca todo lo que da vueltas dentro de mí y enséñame a detenerme. No dejes que viva las cosas superficialmente, con esa prisa que me hace daño, con esa inquietud que no me permite disfrutar de lo que me regalas.
Mira esa fiebre interior que a veces me atormenta. Calma, serena, aplaca esa carrera loca que hay dentro de mí.
Ven Espíritu Santo. Enséñame a valorar el misterio de cada cosa y de cada ser humano, para que les dedique el tiempo y la atención que se merecen, para que pueda aprender el mensaje profundo de todo lo que me toque vivir.
Ven Espíritu Santo, a derramar tu dulce calma en todo mi ser.
Amén."

12 comentarios:

  1. Gracias Señor Espíritu Santo. Amén.

    ResponderBorrar
  2. Amén... Amén... Amén..!!! Dios les cuide y favorezca.

    ResponderBorrar
  3. Ven Espíritu Santo a derramar tu dulce paz en todo mi ser

    ResponderBorrar
  4. Ayúdanos espíritu santo Amén y Amén

    ResponderBorrar
  5. Ayúdanos espíritu santo Amén y Amén

    ResponderBorrar
  6. Buenas noches.La meditación del miércoles 7 de agosto.Gracias.

    ResponderBorrar
  7. Gracias Espíritu Santo, por llenar mi vida de Paz
    Gracias, gracias gracias

    ResponderBorrar
  8. 7 de agosto


    Hoy la Iglesia celebra a San Cayetano. Es un santo muy popular porque muchos se acercan a pedirle ayuda. Pero es importante que veamos también cómo fue su santidad para poder darle gracias al Espíritu Santo por su obra santificadora.

    Después de criarse en la nobleza se hizo sacerdote, y fue distinguido con honores eclesiásticos. Pero él prefirió dedicarse a los enfermos de un hospital en Vicenza, de tal manera que muchos nobles de la ciudad se sintieron atraídos y se acercaron también como voluntarios al hospital.

    Luego se trasladó a Venecia, donde gastó su fortuna para reparar un hospital y ayudar a los pobres. Después fundó una congregación que debía caracterizarse por un total desprendimiento y por no poseer renta alguna, viviendo en el día a día de lo que la providencia de Dios les concediera. Su sueño era que los sacerdotes vivieran como los primeros cristianos. Uno de sus lemas era: «No el amor sentimental, sino el amor activo».

    En el Evangelio hay una promesa para las personas desprendidas: al que se entregue a Dios por el Reino no le faltará nada, no tendrá que preocuparse por su futuro (Le 2,27-30), porque estará protegido y tendrá el auxilio de su Padre.

    En el pequeño grupo de los primeros compañeros de San Cayetano podemos ver realizado este misterio de pobreza y desprendimiento que el Evangelio propone, pero que no se trata de una ascesis fría y perfeccionista. Es más bien una respuesta de amor a Jesús pobre y un modo de unirse más perfectamente a los pobres, amados con predilección. Pero también podemos reconocer en ellos el consuelo y la alegría de los que, en su pobreza, se saben protegidos por el amor del Padre.

    Por eso, podemos descubrir que al Espíritu Santo le gusta crear comunidades santas, y no sólo individuos santos.

    Pensemos qué hermoso sería si el Espíritu Santo pudiera santificar nuestra familia, nuestro grupo de amigos, nuestro barrio, así como santificó a la comunidad de San Cayetano.

    ResponderBorrar