miércoles, 29 de agosto de 2018

29 de Agosto

Hoy celebramos el martirio de Juan el Bautista, y eso nos permite descubrir algo muy importante: Los que se dejan llevar por el Espíritu Santo, son fieles a sus convicciones hasta la muerte. Pero los que rechazan las inspiraciones del Espíritu Santo, terminan destruyendo lo bueno que hay en el mundo.

El texto de Marcos 6,17-29 se detiene a narrar la muerte de Juan el Bautista, donde se muestra que el poder de la apariencia social y de la vanidad es tan fuerte que puede torcer las mejores intenciones. Porque Herodes admiraba a Juan, lo protegía, lo consultaba y lo escuchaba, pero no podía negarse a entregar la cabeza de Juan para no quedar mal delante "de los convidados" (Marcos 6,26). Hasta ese momento, Herodes respetaba a Juan. Sin embargo, la palabra del profeta no había logrado llegar al corazón, donde se toman las decisiones más profundas. Allí tenían más poder las habilidades de una mujer, que lo llevó a asesinar a Juan.

Esta historia no deja de ser una profunda exhortación para que reconozcamos nuestro propio corazón, lo que realmente nos mueve, más allá de la apariencia, más allá de los sentimientos y emociones superficiales, más allá de las palabras. Nos hace ver las resistencias que hay en el mundo frente al Espíritu Santo, que nos invita a modificar las cosas establecidas y a cambiar un estilo de vida. Porque el ser humano normalmente prefiere dejar las cosas como están y evita lanzarse a lo que todavía no sabe controlar. Por eso le tiene miedo al Espíritu Santo y prefiere eliminarlo de su vida. Esto nos invita también a que nos preguntemos de modo permanente si nuestro deseo de tener todo bajo control no nos está cerrando el corazón a los nuevos caminos del Espíritu Santo.

Juan el Bautista se entregaba lleno de confianza, porque estaba lleno del Espíritu, y sabía que su muerte injusta no era el final de la historia. Del amor brota esa certeza. Ese amor lleno de esperanza es infundido por el Espíritu Santo en nuestros corazones (Romanos 5,5).

11 comentarios:

  1. Espíritu Santo por favor ayudanos no nos abandones

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  2. Espíritu Santo,dame tu luz para ser consciente de mi ego,dejarlo a un lado y seguir tus huellas llenas de paz.

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  3. Gracias Espiritu Santo por tu ayuda de cada día. No me abandones nunca. Qué sepa transmitir a los demás mi amor por ti

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  4. Espíritu santo,dame PAZ ESPIRITUAL,y asi la podré transmitir a los demas

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  5. Gracias Espíeitu Santo por un día más de vida y por todo lo que me das! Perdóna por favor mis ofensas en nombre de Mi gran Señor Jesucristo y te pido que me ayudes a emtregarme del todo a ti y a tu misericordia. Ayúda a todas las personas del mundo y a mis conocidos, familia y amigos que necesitamos tanto de ti. Intercede por favor te lo ruego en nombre de Jesucristo. Amén y gracias
    Te adoro Abba. Eres mi todo nunca permitas que me aleje de ti. Líbrame de tentaciones y házme conocer mis límites.

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  6. Ven Espiritu Santo y llenanos de tu presencia.

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  7. Espíritu Santo haz que siempre proclamemos la verdad y la justicia como lo hizo Juan para así construir un mundo mejor y justo para todos. Amén

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  8. " Esto nos invita también a que nos preguntemos de modo permanente si nuestro deseo de tener todo bajo control no nos está cerrando el corazón a los nuevos caminos del Espíritu Santo. "

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  9. El Espíritu Santo:Nos llena de una inmensa Paz.

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  10. Es perdona mis ofensas....ten piedad de mi....dame tu misericordia para que mi alma encuentre paz.

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  11. ES llena de amor a mi corazón y que no tenga miedo de darlo.Amén

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