No hay nada mejor para nosotros que confiar en el Espíritu Santo; pero de verdad, no de la boca para afuera.
La verdadera confianza es una fuente de libertad, de fuerza y de entusiasmo. No es algo que nos deja quietos, pasivos. Todo lo contrario. Confiar en alguien que nos ama, nos da una gran seguridad para enfrentar las cosas con calma y con eficacia.
Cuando más nos confiamos en el Espíritu Santo, más nos sentimos seguros, protegidos. Es bueno disfrutar de ese sentimiento de protección, y así caminar por el mundo, y enfrentar la vida.
Porque la protección del Espíritu Santo es también una orientación, una guía que nos conduce por el camino, un brazo que nos apoya y suavemente nos empuja para que avancemos.
Nosotros buscamos, nos ocupamos, tratamos de discernir, pero no estamos solos, somos guiados por un consejero seguro. Gracias Espíritu Santo.
Espiritu Santo tu confianza me hace sentir seguro. AYUDAME a sanar de cuerpo y alma. PROTÉGEME a mi familia amigos y vecinos. Amen
ResponderBorrarCada día te pido que cambies un poco más mi corazón ,Espíritu de Dios ,para poder llegar con tu ayuda a la.presencia de Dios algún día.Sin ti nada puedo
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