Hoy la Iglesia celebra a San Pedro y a
San Pablo, elegidos por el Espíritu Santo para extender la Iglesia en
los primeros tiempos. Toda la obra de ellos fue hecha por el impulso del
Espíritu Santo, que guía a su Iglesia.
Pedro y Pablo juntos nos
recuerdan el llamado a comunicar a los hermanos la fe que hemos
recibido, sabiendo que el mundo necesita de ese anuncio. Creemos que la
fe puede hacer nacer un mundo nuevo. De hecho, Pedro y Pablo, con su
misión, ayudaron a cambiar la sociedad pagana de aquella época.
Ellos
nos enseñan a alimentar una esperanza comunitaria, porque no esperamos
sólo para nosotros, sino para el mundo y la historia donde estamos
insertos. En realidad ésta es la dinámica propia del amor, por el cual
se hace particularmente presente en la historia el dinamismo del
Espíritu Santo, que nos arroja a lo insospechado.
Estamos
llamados a vivir el gozo de cooperar con la novedad del Espíritu. Pero
hay que dejar la cómoda orilla y arrojarse "mar adentro" (Lucas 5,1
-11), venciendo los miedos (Marcos 4,35-41) con la mirada puesta en
Cristo (Mateo 14,22-33). Es el gozo de decir a los demás que "hemos encontrado al Mesías" (Juan 1,41.45).
Cuando
dejamos que el Espíritu Santo -que brota del corazón del Resucitado-
nos impulse en esta tarea, seguramente experimentamos las maravillas que
él puede hacer en los corazones, y nos admiramos viendo lo que puede
lograr su gracia.
Eso es lo que vivió intensamente San Pablo, que predicaba el Evangelio "no sólo con palabras, sino también con poder y con el Espíritu Santo, con plena persuasión" (1 Tesalonicenses 1,5). También San Pedro hablaba de este precioso Evangelio predicado "en el Espíritu Santo" (1 Pedro 1,12).
Pidamos al Espíritu Santo que nos llene de esa misma fuerza para cambiar el mundo.
Gracias Dios por la Fe que has inspirado en cada uno de nosotros con la cual le ha dado confianza y esperanza a nuestra vida
ResponderBorrarContinúa Dios nuestro , a travez de tu Espiritu Santo , alimentándonos para que esta Fe sea fortalecida cada día
Guíanos como lo hiciste con tus apóstoles, a llevar tu mensaje de amor y esperanza a todos aquellos que nos rodean.
Que sepamos compartir y expresar nuestra Fe , con palabras y nuestro comportamiento
Y que todo sirva para tu mayor gloria
Te lo pedimos Señor