miércoles, 10 de agosto de 2016

10 de Agosto

Los que se dejan llevar por el Espíritu Santo, poco a poco se van llenando de fuerza y de valentía. Dejan de ser cobardes y mediocres, y se hacen capaces de dar la vida. Eso es lo que hoy contemplamos recordando al mártir San Lorenzo.

Jesús nos enseñó que "el que quiere salvar su vida la pierde" (Juan 12,25). Así lo vivió San Lorenzo, cuando se entregó al martirio con entereza y completa disponibilidad. Cuenta la leyenda que cuando lo colocaron en una parrilla ardiente, después de un rato pidió que lo dieran vuelta para no demorar la entrega total que tanto deseaba.

Sin embargo, a veces no se trata de buscar alguna misión extraordinaria que nos haga sentir héroes o mártires, ni consiste en esperar que nos llegue alguna ocasión de sufrir algo grande que podamos ofrecerle al Señor. Normalmente se trata de aceptar de un modo libre la misión que nos toca cumplir, y de aceptar todas las molestias, cansancios cotidianos e incomodidades que acompañan a esa misión.

Jesús dijo: "Donde yo esté estará también mi servidor" (Juan 12,26). Lorenzo es uno de los que siguió a Jesús también en una muerte violenta. No se dejó contagiar por la sociedad corrupta de su época. Pero cuando estaba siendo quemado vivo podría haberse sentido fracasado. Sin embargo, se entregó con confianza, sabiendo que Dios siempre hace fecunda nuestra entrega. En el testimonio de este mártir, que nos refleja la entrega de Jesús en la cruz, nuestros sufrimientos por el Señor nos parecen pequeños, y entonces dejamos de quejarnos tanto por lo que nos sucede.

Así se nos presenta con claridad la exhortación de la carta a los Hebreos: "Fíjense en aquel que soportó tal contradicción de parte de los pecadores, para que no desfallezcan faltos de ánimo. Ustedes todavía no han resistido hasta llegar a dar la sangre en la lucha contra el pecado" (Hebreos 12,3-4). El Espíritu Santo es el que nos da esa resistencia, porque solos no podemos. Pidámosle que derrame esa seguridad y esa fortaleza en nuestras vidas.


4 comentarios:

  1. Grasias espiriru santo por darme esa fuerza para ber las cosas de una manera bien tu qe siempre me ayudas en salir adelante en aser las cosas bien sin desesperarme ni estar de mal humor te doy grasias dios por esta vida que me diste te pagare dandote lo mejor de mi amen

    ResponderBorrar
  2. --

    Dios nuestro
    Mientras más te conocemos, a travez de la vida de Cristo, más te amamos y más vamos confiando en Ti

    Ayúdanos a alcanzar esa confianza que da fortaleza y valentía , esa confianza que permite encarar y resistir los momentos difíciles que se nos presentan en la vida

    Ayúdanos a no desfallecer y confiar en tu presencia en nuestra vida

    Ayúdanos a resolver los problemas y dificultades que esta en nosotros hacerlo y confiar en tu amor y sabiduría en todos aquellos que no está en nosotros resolverlo

    Ayúdanos Señor nuestro

    ResponderBorrar